Historias de rutina
Camino por la calle para encontrarme con amigos. Un tipo me agarra del brazo e intenta arrastrarme hacía él. Le grito que me suelte y comienza a vociferar: me llama puta y demás improperios hasta que desaparezco al final de la calle. Es sábado por la noche y estoy en el metro tras terminar de trabajar. Un tipo me lanza besos desde lejos, cambio de lugar y se vuelve a colocar a mi lado. Cuando estoy bajando del vagón intenta besarme y lo aparto de un empujón. Cuando vuelvo par